Consiste en 12 cápsulas de video, de animaciones a color que duran dos minutos; pretende sensibilizar a las personas para que recurran a asistencia profesional cuando lo requieran.
Ante el panorama ocasionado por la pandemia de la Covid-19 y con el objetivo de explicar a la sociedad cuáles son las principales emociones que se experimentan en el actual contexto, cómo se manifiestan y cómo manejarlas, la Coordinación de Humanidades de la UNAM, a través de la Dirección General de Divulgación de las Humanidades (DGDH), y la Coordinación del Programa Institucional de Tutoría de la Facultad de Psicología, lanzan el proyecto Diccionario de las emociones.
El proyecto consiste en 12 cápsulas de video, de animaciones a color, con una duración de dos minutos. En una primera etapa se tratarán los temas: enojo, sorpresa, tristeza, miedo, alegría, ansiedad y melancolía. Cada cápsula será transmitida de manera semanal, la primera fue el pasado 16 de febrero, por medio de diferentes medios de comunicación y plataformas digitales.
Para dar salida al contenido del Diccionario…, participarán en el esfuerzo los siguientes medios de comunicación: TV UNAM, Radio UNAM, Canal Once del Instituto Politécnico Nacional, la Red de Radiodifusoras y Televisoras Educativas y Culturales de México (Red México), el Sistema de Transporte Colectivo Metro y Heraldo Media Group.
Con este proyecto, las instituciones que lo alientan buscan que distintos públicos tomen conciencia de qué es lo que sucede cuando les sobrecoge una emoción, pero, ante todo, ofrecerles un mecanismo de control sobre ellas.
Asimismo, se pretende sensibilizar a las personas para que recurran a asistencia profesional cuando la agudeza de sus emociones afecten su salud mental, sus relaciones familiares, laborales y su interacción social. La adquisición de técnicas para reconocer y manejar nuestras emociones nos ayuda a vivir mejor.
Reto del confinamiento
La pandemia causada por la Covid-19 ha representado un desafío emocional para la mayoría de las personas ante el confinamiento, la distancia social y la crisis laboral y económica que se sucedieron luego de dos años de emergencia sanitaria.
Cuadros de ansiedad, incertidumbre, tristeza, temor, enojo, obsesiones y fobias, y algunas otras problemáticas mentales, se incrementaron en los últimos meses. Estos cambios emocionales son producto del impacto por el miedo a contraer la enfermedad y por duelos ante la pérdida de seres queridos, entre otros factores.
La evasión social, por ejemplo, impactó la vida de la gente que no pudo satisfacer sus necesidades afectivas, deportivas y hasta sexuales. Del mismo modo la baja actividad económica dejó pérdidas de empleo y cierre de pequeñas y medianas empresas. Por si fuera poco, el encierro en los hogares generó que se dispararan los casos de violencia familiar y rupturas matrimoniales.
Canal Once transmitirá los días lunes, miércoles y viernes a las 14.58, justo al inicio de su barra Once Niños.
Radio UNAM los lunes y sábados; así como en el programa La ciencia que somos, que se transmite los viernes a partir de las 10 horas y que se retransmite en diversas emisoras nacionales y de América Latina. Por su parte, TV UNAM incluirá esta producción en el programa La UNAM responde; mientras la Red México lo incluirá como parte de la oferta de sus socios y El Heraldo en diversos espacios de su programación en sus diferentes multimedios.
Por su parte, la DGDH publicará semanalmente en su página HumanidadEs Comunidad (http://www.humanidadescomunidad.unam.mx) y en sus redes sociales, las cápsulas, infografías y artículos que se derivan del Diccionario de las emociones.
¿Qué son?
De acuerdo con el diccionario antes mencionado, las emociones son colecciones de respuestas químicas y neuronales que regulan al organismo para actuar frente a un fenómeno determinado. Se desencadenan de forma automática y son fundamentales para la supervivencia. Las principales áreas cerebrales involucradas en el procesamiento de emociones básicas son el sistema límbico y la corteza prefrontal.
Las emociones constan de cinco factores: expresión motora, componentes cognitivo, neurofisiológico, motivacional y experiencia subjetiva. Cada uno tiene funciones específicas y dependen de diferentes subsistemas del organismo.
La expresión motora, por ejemplo, se aprecia sobre todo en la actitud facial, ya que es uno de los medios primarios en los que se refleja la emoción. Su reconocimiento por parte de un agente externo cumple un papel fundamental en la interacción con los otros, ya que sirve como guía para el comportamiento social humano.
En todos los organismos, la reacción emocional es un mecanismo puesto en marcha de modo automático, pues busca realizarse en el menor tiempo posible. Es producida ante una información o acontecimiento externo o interno; actual, pasado o futuro; real o imaginario; consciente o inconsciente.
Por tanto, tenemos un mecanismo de valoración automática de los acontecimientos que llegan a nuestros sentidos. Si valoramos que el acontecimiento nos afecta de alguna forma, entonces se activa la respuesta emocional.
Los datos lo confirman
Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en el último año la población adulta con síntomas de depresión asciende a 15.4 por ciento, pero entre las mujeres alcanza 19.5 por ciento. Asimismo, 19.3 por ciento de la gente mayor de 18 años vive con ansiedad severa; a la par, 31.3 por ciento la padece de manera leve. Por otro lado, 11.6 por ciento de los mexicanos tiene problemas de consumo de sustancias adictivas.
Respecto al ámbito laboral, 14.8 por ciento de la población económicamente activa perdió su trabajo o negocio en los últimos 12 meses. Además, la expectativa de no poder cubrir sus necesidades económicas al mes, alcanza a 43.4 por ciento de los adultos en el país.
Para más información del Diccionario… visita www.humanidadescomunidad.unam.mx.
Contacto: Antonio Sierra asierra@ humanidades.unam.mx y Octavio Olvera octavio12008@live.com.mx.
ENOJO
- ¿Alguna vez has discutido con alguien, llegaste tarde por el tráfico o han sido injustos contigo? Es probable que en estos casos hayas sentido enojo.
- Esta emoción se manifiesta cuando nos encontramos en una situación que consideramos que “está mal” y puede presentarse desde una irritación leve hasta experimentar ira.
- Cuando nos enojamos, nuestros músculos se tensan; el ritmo cardiaco se acelera, la presión arterial aumenta y nos ruborizamos. Si la emoción es muy intensa, puede que nuestro juicio se nuble y reaccionemos.
- El enojo se manifiesta muy rápido. Nuestro cerebro interpreta que algo no está bien en ¡300 milisegundos!. El organismo libera dopamina y noradrenalina, sustancias que provocan las manifestaciones del enojo.
- Enojarse es una respuesta natural que te ayuda a determinar lo que es inaceptable y te prepara para protegerte. Bien encauzado, el enojo puede motivarte a cumplir metas y autosuperarte.
- Sin embargo, es importante saber cómo manejar esta emoción. Si no lo hacemos adecuadamente, podemos herir a otros y a nosotros mismos.
- Algunas recomendaciones son: reconocer que estás enojado, pensar qué puedes hacer antes de reaccionar y tomar una decisión. Realiza actividades que te ayuden a regresar a un estado de calma, ten pensamientos positivos y expresa cómo te sientes.