Por Gabriel Gamar
A tus años no es fácil entender algunas cosas
Te faltan razones, te sobran juguetes
Y el tiempo se pasa como fugaz vuelo.
Apenas ayer peinabas muñecas,
Hoy ya no lo haces con tanta frecuencia
Ahora tus horas se llenan de sueños.
Se llenan de nombres de niños
Que corren detrás de tus huellas
Que luego te mandan tu nombre y un verso
O un “Te amo Sasha”.
Lloras en sus brazos de papi y de mami
La infeliz despedida de un amigo inocente,
Que se fue adelantando a encontrar el camino
Porque no fue posible que aquí lo encontrara.
Mas, después te sonríes y pides que callen,
Que las bocas no hablen,
Que no lloren los ojos esa despedida
Ya fue suficiente,
Se acabó el martirio
Y un niño seguirá corriendo detrás de tus huellas
Y escribiendo en papeles un “Te amo Sasha”.
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