Una vez más es noticia el famoso avión presidencial, que no ha salido ni rifado, mucho menos vendido. Ahora el presidente de la República ha reiterado la intención de constituir una nueva línea aérea en torno a esta lujosa aeronave, que estaría a cargo de la Sedena.
Para completar la flota de esta nueva aerolínea se contratarían en arrendamiento 10 aeronaves de tipo comercial, administrada por la empresa Olmeca Maya Mexica, que forma parte de la Sedena y es la encargada de operar el Aeropuerto Felipe Ángeles (AIFA) y operará el Tren Maya cuando éste se haya concluido.
Esto significa que el avión presidencial ya no estaría en venta y tampoco sería utilizado por la presidencia de la República, sino que se utilizaría para dar servicio comercial en la nueva empresa Mexicana en vuelos especiales, toda vez que es una aeronave no apta para muchos pasajeros, debido a la adaptación especial que tiene.
Llamó mucho la atención una reciente declaración del presidente de la República en el sentido de que no se pudo vender, porque es tan lujoso que a los posibles compradores les dio pena tenerlo y por eso no se animaron a comprarlo. Además, hay quien lo quiere adquirir, pero pretenden pagar menos de lo que establece el avalúo comercial.
UNA NUEVA MEXICANA.
El colmo de todo esto es que la nueva aerolínea se llamaría “Mexicana”, lo cual sería una burla para los cientos de trabajadores que se quedaron en el aire luego de la quiebra de la empresa Mexicana de Aviación, sin que hasta la fecha les hayan cubierto sus derechos laborales.
De ser cierto que se adquirirá la marca Mexicana para la creación de esta nueva empresa, se tendría que contemplar de antemano la liquidación de todos los trabajadores que pertenecían a Mexicana de Aviación, con todo y sueldos caídos y prestaciones laborales que están peleando desde hace diez años, cuando se afectaron a más de 6 mil familias.
Primero deberán concluir la liquidación de Mexicana de Aviación, vendiendo los activos y rescatar todo lo rescatable, para liquidar a sus trabajadores y pilotos, para luego poder vender el nombre y echar a volar los nuevos aviones.
El hecho de que se contraten algunos de los pilotos que trabajaban en la antigua aerolínea, no significa que no los tengan que liquidar conforme lo marca la ley y el contrato colectivo.
Una vez más renace el sueño de echar a volar el avión presidencial, que lleva el mismo tiempo que Mexicana de Aviación tiene sin volar.
Es poeta, redactor y fotógrafo originario de Puebla, radicado en Coatzacoalcos, Veracruz. Ha escrito varios libros de poesía y narrativa como Archivo de Sueños, Corazón de Metal y El Lugar Común, así como el poema Viajar es Regresar.