Por su contribución científica y la formación de recursos humanos de alto nivel.
Por su contribución científica y la formación de recursos humanos de alto nivel, Leonardo Lomelí Vanegas, secretario general de la UNAM, fue admitido para formar parte de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) como miembro regular.
El universitario destacó el trabajo que realiza esa agrupación en favor de la ciencia en México. “Creo que es muy importante que las ciencias sociales participen. En este momento debemos sumar esfuerzos para defender este conocimiento en nuestro país”.
En entrevista, el economista e historiador expresó que formar parte de la Academia “es un honor muy grande para mí; es una institución a la que siempre he admirado y respetado; colaboraré en todo aquello que sea requerido. Ahí se desarrollan diversas labores de difusión de las ciencias, de formación de recursos humanos, diferentes trabajos en comisiones, así que estaré en la mejor disposición de contribuir en todo ello, a partir del momento en que reciba la constancia formal de ingreso”.
Hay que insistir, prosiguió, en el valor social de la ciencia, en la importancia de promoverla y en la necesidad de apoyarla, así como concientizar a la sociedad y al gobierno de que es preciso impulsarla más.
Las ciencias sociales, precisó, son fundamentales para aportar soluciones ante los grandes problemas del país, de manera destacada la desigualdad –que es una cuestión crónica– y la violencia, la cual se ha vuelto un asunto muy preocupante en los últimos años.
Vocación doble
Leonardo Lomelí estudió dos licenciaturas en la UNAM: una en Economía, y la otra en Historia; en esta última disciplina obtuvo los grados de maestro y doctor, también por esta casa de estudios.
“He sido profesor en las facultades de Economía (FE) y de Filosofía y Letras (FFyL). En la primera soy profesor de tiempo completo, y me he dedicado a la historia tanto de la política económica en México como de la social”, detalló.
El también integrante del Sistema Nacional de Investigadores, en el nivel II, refirió que dentro de las líneas de indagación en las que se ha dedicado, sobre todo, en los periodos que abarcan del porfiriato a la posrevolución (1892-1938). Asimismo, ha trabajado en la historia de los sistemas de salud y de pensiones en nuestro país, de 1942 a la fecha.
Dentro de su campo de especialidad, una de sus principales contribuciones ha sido precisamente en el estudio de la política económica del porfiriato que, aunque formalmente era liberal, utilizaba una interpretación positivista para proteger a algunos sectores económicos.
“Quienes crearon esa política económica fueron el secretario de Hacienda, José Yves Limantour, y su grupo, que se denominaba ‘Los científicos’, porque decían que aplicaban la ciencia económica y del gobierno para el diseño de políticas; aunque en los hechos justificaban las que favorecían a sus intereses personales”, comentó Lomelí Vanegas.
Actualmente está por concluir su libro La economía política de la reconstrucción nacional, el cual aborda el periodo desde 1917 –cuando se promulga la Constitución de Querétaro– hasta la Expropiación Petrolera. Al respecto, detalla: “trata de cómo se va reglamentando la Constitución y se comienza a construir el nuevo Estado surgido de la Revolución, en un momento muy interesante de la historia no sólo de México, sino del mundo, porque coincide con que Estados Unidos se convirtió en la potencia dominante, después de la Primera Guerra Mundial”.
Desde entonces se dio una relación muy estrecha entre nuestro país y el vecino del norte. Con ese trasfondo, los gobiernos posrevolucionarios comienzan a construir un nuevo Estado que interviene más en la economía y trata de llevar a cabo las reformas que se prometieron.
La labor académica de Lomelí Vanegas no sólo consiste en investigar, sino en formar recursos humanos, razón por la cual ha dirigido más de 50 tesis de licenciatura, otras de maestría y actualmente tres de doctorado.
El también tutor de los posgrados de Economía e Historia de la UNAM ha sido profesor en la FE desde hace 28 años, de la cual fue director de 2010 a 2015. También fue docente del Colegio de Historia de la FFyL y ha sido profesor invitado en las universidades Nacional Agraria La Molina, de Perú (como parte de un programa de posgrado conjunto con nuestra Universidad), y de Málaga, España.
Conferencista en México y el extranjero, en países como Brasil, España o Estados Unidos, explicó que uno de los requisitos para ingresar a la AMC es ser propuesto por un miembro de la propia Academia: “Me propuso Javier Garciadiego Dantan, historiador investido recientemente como doctor honoris causa por la UNAM, lo cual es motivo de doble celebración”. También hay que incluir el currículo, con la obra de los últimos tres años y lo relevante de toda la trayectoria académica.
Con base en lo anterior, el Comité de Membresía de la agrupación evalúa y decide si procede la admisión o no de cada candidato. En este caso, Leonardo Lomelí ingresará a la sección de Ciencias Sociales de la Academia.