Durante las últimas semanas se ha registrado un incremento en la actividad epidémica de COVID-19 prácticamente en toda Europa, así como en algunas ciudades de los Estados Unidos de América (EUA) y Canadá. El crecimiento de casos aumenta el riesgo de transmisión a nivel regional y global, así como la probabilidad de que se generen nuevas variantes del virus causante de esta enfermedad, y con ello que un mayor número de personas desarrollen condición pos-COVID-19 una vez que se recuperen del padecimiento.
Aun cuando en México estamos en un momento relativamente favorable respecto a COVID-19, es importante resaltar que en las cinco olas que se han presentado en nuestro país existe como antecedente el aumento de la actividad epidémica en Europa y EUA. Por lo tanto, al coincidir esto con el avance del otoño y el invierno, es altamente probable que las condiciones epidémicas cambien en las próximas semanas, y se incrementa no sólo el número de casos de COVID-19, sino también otras infecciones respiratorias agudas propias de la temporada, entre las que se encuentran las causadas por los virus de influenza y el sincitial respiratorio, que pueden provocar cuadros potencialmente graves en personas vulnerables.
Por lo anterior, y tomando en cuenta la experiencia adquirida durante los meses en los que se han llevado a cabo actividades presenciales sin contratiempos en la UNAM, gracias a la aplicación de las medidas generales de prevención que la comunidad universitaria ha implementado de forma solidaria y responsable, emitimos las siguientes recomendaciones:
- Completar el esquema de vacunación contra COVID-19 con los refuerzos que correspondan de acuerdo con la edad o condición de salud individual. Es conveniente que todas las personas mayores de 60 años, así como los de más de 18 con alguna enfermedad predisponente y todo el personal de salud tengan dos refuerzos. Y quienes sean mayores de 18 sin enfermedades predisponentes cuenten con un refuerzo adicional a su primer esquema, sin importar cuál o cuáles vacunas hayan recibido.
- Usar correctamente el cubrebocas al realizar actividades en espacios cerrados.
- Ventilar de manera permanente lugares cerrados donde se realicen actividades (abrir puertas y ventanas), así como tener higiene individual (lavado de manos, uso de gel, estornudo de etiqueta) y limpieza de instalaciones.
- Ante la presencia de síntomas de enfermedad respiratoria, evitar acudir a sitios de trabajo, estudio o esparcimiento, y suspender viajes, para reducir el riesgo de contagios. Buscar diagnóstico, y en caso de confirmar que sea COVID-19, guardar aislamiento mínimo siete días a partir del inicio de síntomas o la primera prueba diagnóstica positiva (lo que ocurra primero), y regresar a las actividades una vez completado este periodo, siempre y cuando se cumplan tres días sin fiebre (sin tomar medicamentos para ello). No automedicarse, vigilar la evolución e identificar oportunamente cualquier complicación.