Porcierto
Una de las estrategias para cuidar la economía familiar es evitar los llamados gastos hormiga, que generalmente no son necesarios y que no forman parte de las finanzas personales planificadas. Entre estos gastos hormiga están la compra
de golosinas en la calle, la cajetilla de cigarros, las compras por impulso o ansiedad, la taza de café y los refrescos, entre otros tantos caprichos o antojos que se nos aparecen en el camino al trabajo o a la universidad.
Este tipo de productos generalmente son innecesarios y van subiendo de precio sin que nos demos cuenta, por lo que llegan a ser más dañinos de lo que parece para nuestro presupuesto personal.
El dinero que te ahorras al evitar estos gastos hormiga se puede utilizar para incrementar el ahorro o bien para cubrir gastos imprevistos o compra de medicamentos.
Según datos de la Condusef en México una persona llega a destinar hasta 32 mil pesos al año en gastos hormiga.
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