Mis queridos lectores, alguna vez ¿han juzgado a alguien sólo por su aspecto? ¿Han dicho de esa agua no he de beber? ¿Y su paladar termina amando ese sabor?
Es muy fácil hoy en día juzgar, señalar y opinar, incluso decir que nunca nos va a pasar algún suceso. Casi puedo afirmar que todos alguna vez lo han hecho. Sin embargo, eso no quiere decir que, porque nosotros hagamos un juicio, sea verdad lo que sale de nuestra boca.
Hace unos días se viralizó en las redes sociales un video en donde un cliente de un banco grababa a una cajera, acusándola de complicidad, debido a que el señor retiró 76 mil pesos en ventanilla de una sucursal de Santander, ubicada en Plaza Las Palmas en Boca del Río, Veracruz minutos después saliendo de este lugar, tomó un taxi y fue asaltado. La víctima señala en el video, que los asaltantes le pidieron exactamente los 76 mil pesos durante el robo, y que le dijeron sacara el dinero de la bolsa que la cajera había visto guardarlo. De igual manera el hombre señala que durante el atraco, los delincuentes apuntaron sus armas a su esposa e hijos, además de golpearlo a cachazos para sacarle el dinero.
Bastaron unos minutos para que se viralizara este video y por ende los cibernautas comenzaron a tomar su propio juicio. No es cuestión de defender a nadie, incluso no hay una verdad absoluta y hasta ahora no hay ningún responsable. Pero pongamos las cosas en una balanza, por un lado, está un ciudadano que saca una fuerte cantidad de dinero, a lo mejor con eso terminaba una deuda, pagaba una cirugía urgente, se compraba un carro, etc. Bueno eso es lo material, sin embargo, el señor presenció cómo a sus seres más queridos los estaban apuntando con pistolas, que en un abrir y cerrar de ojos podrían matarlos, si es que al delincuente se le antojaba. ¿Se imaginan la impotencia, terror o miedo que sintió?
Bueno y por el otro lado está una mujer que fue a trabajar como todos los días y solamente hizo su trabajo, sin saber el largo día que le esperaba, una mujer que a lo mejor tiene hijos a lo mejor no, pero de lo que si estoy segura es que tiene familia y sentimientos, y que sin ser juzgada ante la ley, ni tener pruebas firmes que le sustenten su delito, ya le crearon una fama de ratera ante millones de personas.
Juzgar antes de tiempo nunca será la mejor opción para nada. Más bien se tiene que ser objetivo, el señor está en todo su derecho de denunciar y que se busquen los culpables a como dé lugar, no es justo que la inseguridad rebase a las autoridades y que todo se quede impune. Y por el otro lado si la cajera se encuentra culpable que pague por lo que hizo, pero y si sólo fueron “suposiciones” y en realidad no tuvo nada que ver ¿Cómo quitas esos comentarios y esas amenazas de todo el inmenso mundo del internet? Para poder juzgar, hay que tener pruebas y si no las tenemos ¿Por qué juzgamos?
*Estudiante de Comunicación de la Universidad Veracruzana.
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