Sin ser adivinos ni desvelar mayores descubrimientos la sociedad mexicana entra de lleno a una fase de intensos mensajes e imágenes de quienes pretenden, en las elecciones del 2 de junio entrante, alcanzar cargos del poder público.
Entre ellos el de la presidencia de la República, el de mayor alcance en el régimen de la República y las enormes responsabilidades y recursos que se manejan en la organización, crecimiento u desarrollo integral.
No es una tarea sencilla pues desde el ejecutivo federal se maneja una apretada agenda con lastres culturales que vienen desde mucho antes, uno y quizá esencial, el de la marginación y pobreza llámese como se llame, desde extrema o intermedia y en la que se encuentran cerca de 70 millones de connacionales de los aproximadamente 130 millones que habitan en el territorio, sin contar los que emigraron o emigran por esa causa, principalmente a Estados Unidos.
Eso implica desde servicios fundamentales o elementales como son educativos, salud, alimentación, medio ambiente, protección a la naturaleza, así como en última instancia actividades productivas por una parte.
Y por otra los que van creciendo o apareciendo en el transcurrir del tiempo: seguridad interior y sus distintas variantes, entre ellas el narcotráfico, robos, homicidios al por más, presentes no sólo en lugares extremos y poco poblados en sierras y llanuras, sino en las ciudades medias y grandes.
Si bien estos temas referidos de la agenda pública y social son compartidos y más ahora en el mundo global, conviene replantear muchos aspectos de los sectores políticos, económicos, académicos y sociales en aras precisamente, dentro de la democracia, alcanzar grados de desarrollo más acelerados.
Quizá sean los retos que hay que plantearse con máxima seriedad en esta gran nación mexicana que está en el ojo de todos y que nunca deja de transformarse.
Por eso más que ofrecer hay que lograr.
1. Entre los grandes pendientes que hay, está una postergada reforma fiscal de fondo a la que ningún presidente la ha querido entrar por razones de orden político pues a nadie le gusta pagar impuestos, lo dicen los economistas y académicos.
2. El próximo lunes 5 de febrero se conocerán las iniciativas del presidente Andrés Manuel López Obrador, las últimas de su gobierno, al Congreso. A saber cuáles pasarán aunque una que dijo sí es probable, la del tráfico de fentanilo, droga que en la vecina nación del norte dio muerte a más 100 mil personas el año anterior y que ya también circula en el país.
3. En México hay 11 mil kilómetros de costas en los océanos Pacífico y Atlántico, posición geográfica única; solamente se cuenta con 16 puertos de altura y 85 de cabotaje. Hace mucho el entonces presidente Echeverría hizo un llamado de ir a trabajar al mar y ahí sigue.
Escritor y periodista