Luis Botello Suárez
Esta mañana, cuando salía de su domicilio en compañía de su hija en Ciudad Victoria, Tamaulipas, fue asesinado ANTONIO DE LA CRUZ, reportero del diario EXPRESO. Le dispararon desde una motocicleta y su hija resultó herida.
Conocí a Toño cuando él era muy joven y estaba a cargo de los temas agrarios. Me percaté de sus cualidades de buen reportero, así como su seriedad y pasión en la búsqueda de la noticia. En lo personal resaltaba su trato sencillo y amable. Era un hombre de bien.
La noticia ha provocado consternación e indignación en el medio periodístico de la capital tamaulipeca y nos impacta muy fuerte a los muchos que lo conocimos y estimamos.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), al condenar el cobarde crimen, destacó que se agrega a los otros once asesinatos de periodistas mexicanos en lo que va de este año y subrayó la impunidad reinante.
En tono enérgico, la SIP reclamó al presidente López Obrador que «deje de lado sus permanentes diatribas a la prensa y asuma la gravedad de la hora».
El crimen de este miércoles 29 de junio se agrega a la ola de asesinatos de alto impacto que han ocurrido en el país en los últimos días, mientras prevalece la impunidad en la inmensa mayoría de los casos, muchos de los cuales ni siquiera se investigan.Manifiesto mi solidaridad con la familia de Toño de la Cruz y con todos los colegas del Expreso, desde su director general, Pedro Alfonso García Hernández.
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