Daniel Moreno Chávez
Ya he contado aquí que soy periodista gracias a mi buena suerte. No repito la historia.Pero sí les cuento que, cuando me inicié en el oficio, yo ya entendía un poco qué era eso del periodismo, porque disfrutaba mucho leer el periódico. No solo para enterarme. Su edición, el papel, las secciones, su ritmo…
Y por eso, pronto empecé a conocer algunas historias del gremio y a ubicar quiénes eran las principales firmas del periodismo en aquellos primeros años 80.
Conocía la historia del Unomásuno de Becerra Acosta y de la ruptura que terminó en la fundación de La Jornada. Sabía quiénes se habían ido y quiénes se quedaron, quién había diseñado La Jornada, dónde se habían refugiado una buena parte de los que salieron del Uno (se fueron a Punto, un periódico semanal dirigido por Benjamin Wong, a quien los de la foto llaman “el periodista más decente que hemos conocido”). Bueno, hasta estuve en la reunión que se organizó en El Hotel de México para recabar fondos para La Jornada en febrero de 1984, aunque no conocía personalmente a nadie.
Seguí leyendo ambos periódicos muchos años.
Ayer tuve la fortuna de comer -bonito Club de Toby- con varios de esos a quienes yo leía con mucha admiración.
Son (cada uno merecería un post, pero bueno…):
Víctor Avilés, a quien yo ya “conocía” cuando lo ascendieron para cubrir Presidencia en el Uno. Clave en el periodismo político.
Pedro Valtierra, siempre generoso con Animal Politico. Nadie podría escribir un libro de periodismo -ya no digamos de fotoperiodismo- sin mencionarlo.
Gerardo Arreola, tantos años el corresponsal de La Jornada en La Habana. Autor de un libro reciente sobre el tema. Nomás.
Ruben Alvarez Mendiola, uno de los «muchachos» de la mesa, pero con 45 años en este oficio . Siempre presumo que he tenido el privilegio de ocupar, al menos dos veces, cargos directivos que él tuvo antes (y eso me hace pensar que algo le he aprendido) Juan Angulo. Editor, director, fundador de El Sur de Guerrero. Mi paisano. El mejor periodista que ha dado Arcelia, Guerrero.
Javier Aranda, también de los jóvenes, fundador de la Jornada y su muy famosa sección cultural, editor de Vuelta, y a quien apenas conocí hoy.
Salvador Camarena, el benjamín de esta mesa donde el promedio de edades era cercano a los 70. Amigo cercano y querido, solidario siempre. Pero además, para otra vez citar a Benjamin Wong: buen periodista ese muchacho.
Y finalmente el anfitrión: el gran Humberto Mussachio. Soy su fan desde que tenía como 17 años. Fan. Ha sido muchas cosas. Una fundamental: la memoria del periodismo cultural.
Por cierto, Humberto cumple 80 años en octubre de 2023 y yo creo que merece un homenaje.
En resumidas cuentas, gocé de un rato de historias y anécdotas con personajes a los que leía, que me hicieron amar el periodismo y a quienes casi consideraba mis amigos, sin conocerlos (hoy puedo presumir que lo son)
Fue una sesión con un grupo que ha sido, y siguen siendo, de mis maestros de periodismo.
En alguna otra sesión, alguien tendría que grabar sus conversaciones. Porque ellos -y muchas y muchos más, por supuesto- han sido clave en la construcción del periodismo independiente en México. Hablamos de varios de los ausentes, como de nuestro querido Carlos Ferreyra, uno de los más grandes.
Hoy deberíamos conocer sus reportajes y entrevistas.
Ellos se lo merecen y nosotros necesitamos memoria.
Son puro chingón. Con ellos yo solo callo, escucho y aprendo.
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