Rodolfo Chena Rivas
¿Cuál fue el contenido material de la realidad humana y el valor de la estimativa
jurídica, incorporados en el concepto “adolescencia” que se razonó para su formalización
legislativa dentro del artículo 18 de nuestra constitución federal? Demos lugar a la opinión
informada de diversas instituciones y estudiosos, sobre este periodo ubicado después de la
niñez, cuyo inicio se da con la pubertad y se concibe como una etapa de la vida de notable y
dinámico crecimiento en los aspectos biológico, sexual, psicológico y social, y cuya fase
posterior es la juventud. Para la Organización Mundial de la Salud: “La adolescencia es el
período de crecimiento que se produce después de la niñez y antes de la edad adulta, entre
los 10 y 19 años. Independientemente de la dificultad para establecer un rango exacto de
edad es importante el valor adaptativo, funcional y decisivo que tiene esta etapa”. El gobierno
de México apunta: “La Organización Mundial de la Salud (OMS), define la adolescencia como
la etapa que transcurre entre los 10 y 19 años. Normalmente la dividen en dos fases;
adolescencia temprana de 12 a 14 años y adolescencia tardía de 15 a 19 años. En cada una
de estas etapas se presentan cambios fisiológicos (estimulación y funcionamiento de
los órganos por hormonas, femeninas y masculinas), estructurales (anatómicos),
psicológicos (integración de la personalidad e identidad) y la adaptación a los cambios
culturales y/o sociales”.
En su conocido “Psicoanálisis de la adolescencia”, Peter Blos anota: “El término
pubertad se emplea aquí para calificar las manifestaciones físicas de la maduración
sexual…El término adolescencia se emplea para calificar los procesos psicológicos de
adaptación a las condiciones de la pubertad…Los complejos fenómenos de la
adolescencia están construidos sobre antecedentes específicos que residen en la niñez
temprana…En la actualidad existe una tendencia a prolongar la adolescencia, debido a las
complejidades de la vida moderna…La adolescencia está principalmente caracterizada por
cambios físicos que se reflejan en todas las facetas de la conducta. Además de que los
adolescentes de ambos sexos se ven profundamente afectados por los cambios físicos que
ocurren en sus propios cuerpos, también, en forma más sutil y en un nivel inconsciente, el
proceso de la pubertad afecta el desarrollo de sus intereses, su conducta social y la
cualidad de su vida afectiva…Los observadores de la adolescencia siempre se han
impresionado con la gran irregularidad en la aparición, la duración y la terminación de la
pubertad…La edad cronológica no nos proporciona un criterio válido para la madurez
física…El adolescente individual siempre vive dentro de un grupo de amigos que están
cronológicamente al mismo nivel, pero que varían mucho en el desarrollo físico e intereses.
Esta condición es la responsable de las muchas formas imitativas y de conducta “como sí”, a
la cual recurre el adolescente para poder mantenerse dentro de las pautas de conducta
esperadas y proteger la compatibilidad social con el grupo de compañeros al que pertenece”.
En letras negritas hemos destacado criterios específicos -como los de edad, de entrada- que
no coinciden con las previsiones constitucionales vigentes entre nosotros desde 2015 y 2016;
empero, existen aportaciones anteriores o recientes que hacen aún más complejo el
concepto de adolescencia…Seguiremos.