Gabriel Gamar
Hay rincones dorados en la tierra
Donde el sol acaricia con su luz,
Ahí se encuentra el paraíso
Y el viento susurra una canción.
Bajo los cielos de azules inalcanzables
Las aves vuelan en busca del edén,
Alguien camina descalzo sobre la arena
Serpenteando los remolinos de las olas,
Las palmeras se mecen con el viento
Y en este paraíso hay belleza y hay amor.
En cada atardecer hay una promesa
De que aparezca mañana el nuevo sol
Con sus tonos de fuego ardiente,
Mientras tanto, la luna se viste de plata
Hasta que vuelva a amanecer.
En este paraíso está la esencia de la vida
Hay paisajes que embellecen por doquier,
El mar se entusiasma y se llena de colores
Como si esa fuera su razón de ser.
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